El fenómeno del neorruralismo no es nuevo, aunque ahora vuelva a sonar con fuerza. De hecho, aún son muchos los que no están relacionados con esta palabra, desconocen su significado e incluso no saben que ellos mismos son neorrurales. En mi caso, no fue hasta hace unos pocos años que me enteré de que era neorrural, y lo hice con la ayuda de un interesante libro editado por la Asociación de Desarrollo Rural de Andalucía (ARA), Neorrurales en Andalucía: 52 experiencias, 52 comarcas.
'¡Da el salto!', reportaje emitido por TVE sobre neorrurales en Extremadura.
El caso es que el neorrural de antes no es el de ahora o, dicho de otra forma, el neorruralismo puede ser consecuencia de muy distintas opciones y caminos. Optar por vivir en el medio rural ha sido durante muchos años la consecuencia del hartazgo que la vida urbana y sus excesos ha provocado en algunas personas. Es decir, los neorrurales de no hace tanto tiempo eran personas que decidían trasladar su lugar de residencia al medio rural, al pueblo, porque querían cambiar radicalmente de estilo de vida. Y el pueblo -su calidad ambiental, serenidad, vecindad, asequibilidad, etcétera- se lo proporcionaba. Incluso surgieron entonces las conocidas como ecoaldeas, núcleos rurales repoblados por familias y gente de ciudad que optaron por la vuelta al campo ‘por devoción’, como ha ocurrido en Francia en la última década.
Reportaje emitido por Canal Sur TV sobre la ecoaldea de El Calabacino (Huelva).
Ahora sigue existiendo esa corriente del neorrural ‘de corazón’, por decirlo de algún modo, pero, mientras la crisis se recrudece, cobra fuerza la población neorrural que busca en el medio rural nuevas oportunidades laborales y profesionales. Las oportunidades que hoy día proporcionan las TIC y el acceso a Internet en condiciones cada vez mejores también en el medio rural, están facilitando esas oportunidades de negocio a empresas ya asentadas desde hace tiempo y que necesitaban un empujón hacia los mercados internacionales. Pero además están haciendo posible que muchas personas -con ideas y talentos claros por explotar- se sumen al e-commerce para vender productos y ofrecer servicios.
La Red amplifica el mercado y te permite llegar a clientes valiosos y, sobre todo, cada vez más acostumbrados al comercio electrónico y a las redes sociales. De hecho, según el Plan Estratégico Nacional de Desarrollo Rural 2007-2013, Internet constituye una oportunidad para el medio rural deben superar la falta de grandes inversiones y basar su atractivo en un modelo de vida más saludable, en bienes y servicios más baratos (como la vivienda) y en un entorno natural privilegiado.
Además, diversos estudios de la propia Federación de Sociología, apuestan por la vuelta a lo local, la vuelta al pueblo (actividades agropecuarias, turismos rural, deportivo y de aventuras, menor consumismo…), máxime en momentos de profunda crisis económica y de valores como en el que actualmente vivimos. Y las estadísticas han detectado que, sobre todo, en cabeceras de comarca ha habido un aumento de la población en los últimos años.
Parece pues que #LaVueltaAlCampo es una opción que se plantean cada vez más personas, neorurrales o gente rural que regresa al pueblo.
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